Renzo Giner Vásquez

Las declaraciones del papa Francisco sobre la guerra en Ucrania, en las que pidió que no se tenga “vergüenza de negociar antes de que las cosas empeoren”, siguen levantando polémica en el Viejo Continente. Este lunes 11, el gobierno de Alemania y la Unión Europea se unieron a Kiev en el rechazo a la posibilidad de que los ucranianos se rindan ante la invasión emprendida por Vladimir Putin desde hace más de dos años. El gobierno ucraniano, además, convocó al representante del Vaticano en su territorio para expresar su fastidio con las palabras del líder religioso.